Los fanáticos de Juego de tronos en este momento ya deben saber de quién y de qué se trata: Pedro Pascal, cuyo personaje en la serie, Oberyn Martell, pierde la vida con Gregor Clegane, quien le arranca los ojos y le aplasta el cráneo.
Fue una de las escenas más violentas y espeluznantes de la célebre serie, pero también una muestra de esos ingredientes que hicieron del programa uno de los grandes éxitos de la televisión en los últimos tiempos.
Desde antes de su final, en 2019, Juego de tronos se volvió un programa de culto y sigue suscitando la pasión de sus millones de seguidores.
Pascal vivió todo ese frenesí por la serie en carne viva y acaba de traer a cuento una anécdota que le sucedió cuando la escena de la muerte de su personaje salió al aire.
“Recuerdo que la gente quería tomarse selfies conmigo con sus pulgares en mis ojos”, relató durante un reciente episodio de The Hollywood Reporter Actor Roundtable, una mesa redonda que transmite la conocida revista The Hollywood Reporter.
En esta oportunidad, además de Pascal, el panel estuvo conformado también por sus colegas Kieran Culkin, Jeff Bridges, Michael Imperioli, Evan Peters y Damson Idris.
Todos ellos soltaron la carcajada al oír la historia de Pascal, que surgió cuando les propusieron recordar situaciones memorables que hubieran vivido con sus admiradores.
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“En principio, yo estaba muy serio y feliz con el éxito del personaje en la serie, que los dejaba”, prosiguió Pascal, nacido en Chile, pero nacionalizado en Estados Unidos.
“Y entonces recuerdo que se me infectaron un poco los ojos”, concluyó, para más risas de sus compañeros en la mesa.
Ese no fue el único ejemplo que Pascal entregó sobre cómo interactúa con sus admiradores. Conocido por otro gran éxito, The Last of us, también contó que, últimamente, le llama la atención que a sus fans se les ha dado por llamarlo ‘daddy’ (papi, en español), en las redes sociales.
“Eso me divierte mucho, parece que tiene que ver con una cuestión de roles”, tratando de explicar lo que pudiera haber detrás de todo eso.
Sobre todo si se tiene en cuenta que, en tiempos recientes, ha interpretado varios papeles como padre. Tal fue el caso de The Mandalorian, serie en la cual encarnó a Din Djarin, mientras que en The last of us su rol es Joel Miller, una figura paterna para Ellie Williams.
Pero él no parece muy dispuesto al respecto: “¡No soy un papi, y no voy a ser un papi!”, exclamó vehementemente.
Al respecto, dicen los cronistas de Hollywood, es bien difícil saber el rol que juega en sus relaciones, pues es bastante celoso con su vida privada, de modo que no se le conoce ninguna pareja ni si tiene hijos, de acuerdo con el New York Post.
